Maria José Patón (mjpaton@patonabogados.com). En el ámbito del Derecho de familia contencioso, ya sea en el caso de separaciones, divorcios o modificaciones de medidas, las conclusiones del informe psicosocial suelen ser una prueba fundamental de cara a la resolución final de los procedimientos. De hecho, una vez se ha emitido el citado informe, y a pesar de no ser vinculante, resulta ser una referencia fundamental de cara a intuir la sentencia final del juez. En definitiva, es una prueba principal y clave en cuya práctica el abogado no puede intervenir.
¿Quién solicita la prueba?
Esta prueba puede ser solicitada por los abogados de ambas partes pero no pueden intervenir en absoluto en el desarrollo de esta cuestión.
¿Quien la realiza?
Un gabinete formado por psicólogos y trabajadores sociales.
¿Cuando se realiza?
Cuando se acuerda la práctica de la citada prueba, se comunica a los abogados el día y la hora en la que se va a realizar, pero es el cliente –sin el apoyo ‘in situ’ del abogado-, quien tiene que afrontarla ante el gabinete que la lleva a cabo.
¿Se pueden recurrir las conclusiones del informe?
Se pueden poner en cuestión las conclusiones del informe, pero es prácticamente imposible que se modifiquen, ya que sería poner en cuestión las afirmaciones del gabinete. Además, las entrevistas no se graban, un hecho que ha suscitado las quejas de numerosos abogados.
La práctica del gabinete psicosocial no puede ser contrastada por otros profesionales y, por lo tanto, los argumentos que se derivan de la misma no se pueden rebatir.
¿Cómo afrontar la prueba?
Cada persona puede reaccionar de una forma diferente ante una prueba de este tipo. De hecho, es posible que, por su mayor o menor facilidad a la hora de expresarse, las conclusiones que se puedan extraer de la información facilitada no se correspondan al 100% con la realidad. Por este motivo, en Patón Abogados, consideramos que es muy importante trabajar con el cliente en términos de comunicación. Las claves para afrontar la prueba psicosocial son las siguientes:
Mensajes clave: Enumerar y memorizar las 3 ó 4 cuestiones más importantes a comunicar para tenerlas siempre presentes a lo largo de la sesión con los psicólogos.
Tono: Cuidar el tono de voz y la forma de expresarse de cara a evitar distorsiones y malas interpretaciones de la información que se puede transmitir. El lenguaje tiene que ser correcto, claro y conciso.
Estado de ánimo: Se debe procurar que el cliente esté tranquilo y relajado a la hora de afrontar la entrevista. Lógicamente el entorno, la relevancia de la cuestión y el hecho de tener que tratar temas personales con desconocidos puede resultar complicado para muchas personas.
Comentarios recientes